Argentina ha saldado con una solvente triunfo ante Francia por 80-66 en el partido correspondiente a las semifinales de la Copa del Mundo que se está disputando en China. Brillante juego el mostrado por los argentinos a lo largo de todo el torneo, que les vale para jugar así la tercera final de su historia. Luis Scola (28 puntos, 13 rebotes y 2 asistencias) destacó notablemente en la selección albiceleste y Frank Ntilikina (16 puntos, 2 rebotes y 2 asistencias) fue de los mejores en las filas galas.
No se contaba con Argentina en la final. La albiceleste no entraba en las favoritas a medalla, pero los pronósticos se rompieron y los argentinos pese a no contar con su generación dorada (a excepción de Scola como único superviviente) van a luchar por el oro, un metal que ya se les escapó en el Mundial de 2002 en Indianápolis pero que luego conquistaron en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004.
Valentía y garra pusieron los argentinos en este partido y a lo largo de todo el campeonato y tuvieron un buen arranque de partido con un 10-2 de parcial ayudado por una gran trabajo defensivo, que obligaron al seleccionador francés a pedir tiempo muerto. Los galos mejoraron y De Colo y Labeyrie metían miedo en el cuerpo a los de Sergio Hernández, que sin embargo lograron resistir y llevarse este primer cuarto (21-18). En el segundo cuarto, Francia seguía muy acertada y el juego exterior formado por De Colo y Fournier lo bordaba para poner a los galos por delante, pero un tiempo muerto de Argentina dio otro aire a la albiceleste y con un 8-0 de parcial los argentinos volvían a tomar el mando del partido. Los triples de Campazzo colocaban siete puntos arriba a Argentina, pero Francia pudo recortar un poco esa renta y se llegó al descanso con un marcador de 39-32.
El paso por vestuarios sentó bien a la albiceslte y bajo el liderazgo de Scola, los de Sergio Hernández mandaban. Luca Vildoza también salió a ayudar a los suyos y el de Baskonia con triples y tiros libres ayudaba a los argentinos a aumentar su renta de puntos hasta llegar a los quince de ventaja. Francia se veía incapaz de frenar la intensidad del rival y sólo pudo reducir la renta albiceleste en tres puntos al finalizar el tercer cuarto (60-48). En el último período, la defensa francesa se mostró más agresiva y los de Vincent Collet tiraron de físico para recortar distancias; los argentinos estaban ocho puntos y los galos ahora estaban en disposición de poder remontar, pero enfrente tenían una selección con mucho coraje y con un jugador de la talla de Scola, que con dos sendos triples de nuevo aupaba a los suyos y Argentina se iba 16 arriba a falta de dos minutos para la conclusión. Francia no tuvo más remedio que hincar la rodilla y se limitó a intentar maquillar el marcador final, aunque apenas lo logró.