La ausencias de los lesionados Navarro, Oleson, Abrines y Eriksson obligaron a Xavi Pascual a completar la convocatoria con dos menores de edad, el serbio Stefan Peno y Eric Vila, y a confiar de nuevo en el gran momento del brasileño Huertas, la progresión del joven y prometedor croata Hezonja y la solvencia de Thomas para formar el perímetro azulgrana. El CAI Zaragoza no arrancó bien el partido, los primeros cuatro minutos no anotaron ni un tiro de campo y el Barça hacía mucho daño en la zona gracias al alemán Pleiss, de este modo se llegó al final del primer cuarto con un resultado de 23-16. En el segundo cuarto los maños poco a poco empezaron a entrar en el choque, primero con Katic y luego con Jelovac, para ajustar el marcador al principio del segundo cuarto, ya que se pusieron a cuatro de los locales; sin embargo, la irrupción de Doellman (10 puntos en este segundo período) devolvía el colchón de diez puntos de renta para los azulgranas en el minuto 15 de partido. Lisch, Sastre y Llompart tuvieron afinada la puntería para los visitantes, pero los triples de Nachbar y Hezonja daban la máxima ventaja al conjunto blaugrana al llegar al descanso (47-34).
Tras la reanudación los aragoneses tuvieron un arranque de partido flojo, similar al del período anterior. El Barça se mostraba muy dominante, especialmente en la faceta reboteadora y lo aprovechó para endosarle a su rival un parcial de 7-0 y colocarse veinte puntos arriba. Parecía que el CAI Zaragoza había tirado ya la toalla, pero el conjunto de Joaquín Ruíz reaccionó gracias a un parcial de 0-10 liderado por Jelovac y colocó a siete puntos al cuadro zaragozano; el checo Satoransky con ocho puntos seguidos dio oxígeno de nuevo al Barça, y sus ocho puntos seguidos permitieron al equipo de Xavi Pascual cerrar el tercer cuarto con un resultado de 69-55. En el último período el Barça no bajó su intensidad de juego, a cuatro minutos para la conclusión final el encuentro estaba ya sentenciado y Pascual dio minutos en el primer equipo a Vila y Peno.
