El FC Barcelona ha vencido esta noche por 108-76 al Lenovo Tenerife en el segundo partido correspondiente a las semifinales de la Copa del Rey que se disputa en el Martín Carpena. Triunfo con contundencia de los azulgranas ante un cuadro tinerfeño que sólo resistió durante los primeros diez minutos. Willy Hernangómez (15 puntos, 7 rebotes y 1 asistencia) fue de los mejores del conjunto culé y Tim Abromaitis (16 puntos y 3 rebotes) destacó en las filas aurinegras.
Ya desde el comienzo se notaba la superioridad del Barça y los de Roger Grimau mostraban un alto ritmo de juego. El equipo azulgrana era el que iba por delante, pero los canarios les seguían muy de cerca y hasta llegaron a ponerse por delante gracias a los puntos de Marcelinho Huertas y Jaime Fernández. El conjunto culé reorganizó sus ideas y volvió a tomar la delantera, pero el Lenovo Tenerife se empeñó en volver a tomar las riendas del encuentro y con un triple de Abromaitis sobre la bocina, se marchó dos arriba al final del primer cuarto (14-16). En el segundo cuarto sólo hubo un color en la cancha malagueña y ese fue el azulgrana. El Barça fue un completo ciclón y Willy Hernangómez lideraba las ofensivas de los suyos. El pívot internacional con España pudo con Diop y Shermadini y los azulgranas se colocaron con un +9. El Barça estaba en su salsa y su intensidad en defensa y ataque era muy alta; Satoransky estaba desatado y los triples de Da Silva, Abrines y Laprovittola no hacían más incrementar la renta culé. Hasta 26 puntos de ventaja llegó a tener el conjunto catalán y los de Roger Grimau habían roto el partido. Con un resultado de 54-24 que reflejaba la superioridad blaugrana se llegó al descanso.
Tras el paso por vestuarios, el Barça bajo su ritmo de juego ante un Lenovo Tenerife que pese a ello no era capaz de aumentar su intensidad debido a que moralmente estaba tocado. La afición en las gradas se lo pasaba en grande y en la pista hubo un intercambio de canastas que no ayudaron a varias diferencias en el luminoso. Con un marcador de 78-48 finalizó el tercer cuarto. No hubo historia alguna en el últmo período y Grimau dio minutos de juego a los menos habituales con el fin de que los titulares dispusieran de descanso y que no sufrieran lesiones. El conjunto tinerfeño se limitó a dar una mejor imagen aunque no fue capaz de reducir diferencias en el marcador final.