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El Real Madrid ha derrotado por 89-83 al FC Barcelona en el primer partido correspondiente a las semifinales de la Supercopa ACB Murcia 2024 disputado en el Palacio Municipal de Deportes. El equipo blanco tendrá la oportunidad de luchar por levantar su séptimo título seguido. Facundo Campazzo (18 puntos, 5 rebotes, 6 asistencias y 33 de valoración) brilló en el conjunto merengue y Jabari Parker (17 puntos y 5 rebotes) destacó en las filas azulgranas.
El inicio de partido fue mejor para el cuadro culé gracias a los triples de Jabari Parker y Kevin Punter, de tal manera que el Barça hizo un 4-10 de inicio que le proporcionaba esperanzas. Sin embargo, el Real Madrid reaccionó de la mano de Rathan-Mayes y Tavares para voltear el luminoso. Al final del primer cuarto se llegó con un marcador de 20-18. Se estancó el ataque blaugrana al inicio del segundo cuarto y eso fue rápidamente aprovechado por el conjunto merengue para distanciarse gracias al buen hacer de Llull y Abalde y los de Chus Mateo lograron un +8. Joan Peñarroya detuvo el juego y el Barça reaccionó y con Anderson y Parker junto a Brizuela, los culés hicieron un 0-8 para darle la vuelta al marcador. Resistieron bien los madridistas las embestidas azulgranas y sólo llegaron uno abajo al descanso (41-42).
Tras la reanudación, el Real Madrid saltó a la cancha de la capital del río Segura con el objetivo de volver a recuperar el control del encuentro y la conexión Tavares-Campazzo permitió a los blancos empezar a dominar el choque hasta lograr doce de ventaja. El Barça estaba totalmente desbordado, pero fue capaz de reaccionar a tiempo y Abrines con dos triples, ayudaba a los azulgranas a recortar diferencias y situarse a seis al final del tercer cuarto (67-61). En el último período, el Barça siguió en un buen momento y entre Vesely y Laprovittola, los azulgranas tuvieron varias oportunidades para ponerse por delante, aunque lo máximo que lograron fue un empate a 75 tras una canasta de Justin Anderson y otro a 80 tras un triple de Satoransky. En los últimos minutos del partido se vio un intercambio de canastas que favoreció a un Real Madrid que estaba muy serio y que fue capaz de mantener el control.