El Real Madrid ha vencido esta noche al Khimki por 104-76 en el partido correspondiente a la Euroliga disputado en el WiZink Center. Los de Pablo Laso estuvieron muy acertados en los triples y esa fue una de las claves de la victoria. Anthony Randolph (19 puntos y 4 rebotes) de los mejores del equipo blanco y Anthony Gill (12 puntos, 4 rebotes y 1 asistencia) de los destacados del conjunto ruso.
Muy acertado comenzó el Real Madrid en los triples por medio de Anthony Randolph y los madridistas se iban nueve arriba en pocos minutos, pero el Khimki no se dejó intimidar y demostró ser durante un corto período de tiempo, uno de los equipos más en forma del continente y de la mano de Evans los de Kurtinaitis hicieron un 0-8 de parcial para colocarse a uno. Los blancos siguieron a lo suyo y desde el 6.75 lo bordaban, a la vez que con Campazzo estaban bien dirigidos y los rusos ni con Jerebko ni Booker igualaban la intensidad local. Al final del primer cuarto se llegó con un marcador de 31-25. En el segundo cuarto, el Real Madrid puso el modo rodillo y la entrada de Jordan Mickey se notó; el jugador norteamericano y curiosamente exjugador del Khimki, estaba fuerte en defensa y dominaba bien la pintura, por lo que el conjunto merengue de nuevo se alejaba y en los triples los de Pablo Laso seguían letales con Carrolll, Rudy, Llull y Randolph y entre ellos daban ya medio partido a los blancos al llegar al descanso (65-42).
Tras la reanudación, la intensidad del Real Madrid no bajaba y seguía aumentando por lo que la renta de puntos lo hacía también y los locales estaban desarbolando a un Khimki totalmente desconocido a lo que acostumbrábamos a ver hasta el momento en la Euroliga. Hasta Thompkins se sumó al festín anotador del conjunto blanco con un triple, de este modo se llegó al final del tercer cuarto con un marcador de 92-56 que dejaba ya todo visto para sentencia a falta de diez minutos. En el último período, Pablo Laso se dedicó a dar minutos a los menos habituales y Garuba y Thompkins dispusieron de ellos para demostrar su valía, especialmente el jugador norteamericano que volvía a la convocatoria del equipo blanco. El Real Madrid jugó relajado en este cuarto y el Khimki lo aprovechó para maquillar el resultado final.