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Los Golden State Warriors vencieron esta pasada madrugada por 104-94 a los Boston Celtics en el quinto partido correspondiente a las Finales de la NBA disputado en el Chase Center. Con este triunfo, los de la Bahía están muy cerca del anillo al poner el 3-2 en la serie. Andrew Wiggins (26 puntos, 13 rebotes y 2 asistencias) brilló en los Warriors y Jayson Tatum (27 puntos, 10 rebotes y 4 asistencias) destacó en los Celtics
Arrancaron muy fuertes los de San Francisco y con una alta intensidad de juego, los de Steve Kerr anulaban en numerosas ocasiones a unos Celtics que iban bajo el mando de Smart y los puntos de Tatum y en los Warriors los más destacados eran Wiggins y Thompson. Los de casa iban progresivamente aumentando su ventaja y se llegó al final del primer cuarto con un marcador de 27-16. En el segundo cuarto, no cambió apenas el curso del partido y los Warriors seguían muy intensos y pese a que Curry no destacaba, los de la Bahía no estaban teniendo problema alguno para mantener a sus oponentes a raya. Los de Boston estaban fuertes en la zona gracias a Robert Williams y Al Horford, pero sus jugadores exteriores no estaban tan acertados como de costumbre. Al descanso se llegó con un resultado de 51-39.
Tras la reanudación, los Celtics saltaron a la cancha californiana más fuertes y con el buen trabajo de sus jugadores interiores y el acierto de Brown, Smart y Tatum, el equipo entrenado por Ime Udoka fue poco a poco recortando la renta del conjunto local. Los Warriors estaban totalmente desarbolados y a un punto se situaron los Celtics al final del tercer cuarto (75-74) y por supuesto todo iba a decidirse en los últimos doce minutos. La mejoría de los de Boston llegó a ser un mero espejismo y en el último período, los Warriors volvieron a mostrar su mejor cara y de la mano del canadiense Wiggins, los de San Francisco tomaron aire y volvieron a alejarse hasta colocar el marcador definitivo.
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