Fue un partido muy igualado en todo momento y que finalmente se decidió en los últimos minutos. Los Thunder comenzaron el choque liderados por Westbrook y el buen trabajo en la zona de Enes Kanter, mientras que los tejanos funcionaban gracias a la dirección de Deron Williams y los puntos de Parsons. Fueron los visitantes los más acertados y eso les permitió terminar el primer cuarto con un resultado de 25-27. En el segundo cuarto, los Mavericks pisaron fuerte y el buen trabajo de Nowitzki y Matthews ayudó a que los locales le dieran enseguida la vuelta al partido y fueran aumentando de forma progresiva su ventaja. Los de Okahoma se durmieron un poco y los puntos de Durant no fueron suficientes, de tal modo que el equipo de Dallas se marchó al descanso liderando el luminoso (56-48).
Tras la reanudación, se cambiaron las tornas por completo y los Thunder se mostraron muy intensos en su juego; los puntos de Durant y Westbrook sirvieron para que los de Oklahoma recuperaran el mando del encuentro ante unos Mavericks que cometieron numerosos fallos, de esta forma los visitantes terminaron el tercer cuarto con un marcador de 74-85. Igualado fue el último período, ambos equipos dieron lo mejor de si y fueron los locales los que mejor plantaron su táctica ante unos Thunder que luchaban contra viento y marea. La buena defensa del equipo de Oklahoma sirvió para que los Mavericks no remontaran (los tejanos fallaron dos triples que hubieran mandado el partido a la prórroga) y que finalmente los visitantes pudieran conseguir la victoria. Este triunfo, supone el séptimo consecutivo para los Oklahoma City Thunder y así poder consolidar su tercera plaza en la Conferencia Oeste.
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