Francia ha logrado esta tarde la medalla de bronce en el
Mundial 2014. Es la primera vez que la selección francesa se cuelga una
medalla en un campeonato del mundo y pese al cansancio del partido de ayer ha
vencido a Lituania por 93-95. Nicolás Batum con 27 puntos fue la estrella gala
y Jonas Valenciunas (25 puntos y 9 rebotes).
Los franceses no han tenido apenas tiempo para digerir la
derrota de ayer ante Serbia. Francia saltó a la pista y fue a por todas desde
el inicio, una canasta bajo tablero de Joffrey Lauvergne y un triple
del pívot sirvieron para que los galos hicieran un 5-0 de
parcial. Dos minutos y medio tardó Lituania en estrenar el marcado ya que
comenzó con un pésimo porcentaje en tiros de campo; gracias a Valanciunas y
Motiejunas los bálticos pudieron sobreponerse al inicio arrollador de Francia
cuyo protagonista fue Lauvergne, el pívot del Khimki lo hizo bastante bien en
la zona obligando a Kazlauskas a dar entrada en pista a Jankunas para frenar
las ofensivas galas. Los lituanos le dieron la vuelta al partido y Vincent
Collet tuvo que dar salida a Diot y Gobert para el equipo cogiera
fuerzas de nuevo, cinco puntos seguidos de Diot dieron de nuevo la ventaja a
Francia, Darjus Lavrinovic empató el partido con un triple en los
instantes finales, pero Batum le contestó con otro y el primer cuarto se cerró
con un resultado de 19-22. En el segundo cuarto se mantuvo más o menos la misma
tónica que en el anterior, Batum seguía haciendo de las suyas y eso beneficiaba
mucho a los franceses, por otra parte Lituania estaba algo desatinada desde el
exterior y tuvo que recurrir a los hombres de la zona para poder anotar; sin
Gobert ni Diaw en pista Francia sufría en defensa pero en ataque tenía buenos
porcentajes de acierto en los tiros de campo. Vincent Collet tuvo que poner una
defensa en zona 2-3 para cerrar el aro ya que el pívot Valanciunas lideraba a
los bálticos en la zona, la táctica funcionó bien y la defensa gala mejoró de
forma notable. Los lituanos se sintieron muy incómodos ya que no tenían ni tiro
exterior ni interior, aún así llegaron al descanso con una mínima desventaja
(42-43).
Tras la reanudación Lituania estuvo bastante acertada en los
tiros de tres puntos. Gracias a Juskevicius y Motiejunas los lituanos acertaron
un gran número de triples, provocando intranquilidad en el banco francés
que idió un tiempo muerto para cortar de raíz la ventaja adquirida por el
rival. Batum seguía luchando para mantener arriba a Francia, pero Lituania no
bajaba su intensidad de juego y con un parcial de 12-5 sirvió para que
lideraran el partido y lo hicieran con ocho puntos de renta; los bálticos
habían cambiado radicalmente su estilo de juego, jugadores franceses como
Gelabale o Pietrus estaban desaparecidos en combate y el equipo galo empezaba a
hundirse al final del tercer cuarto (71-64). En el último período Francia saltó
a la cancha con una defensa 2-3, eso ahogó a Lituania que estuvo tres minutos
sin ver aro y los franceses tomaron de nuevo la delantera; Valanciunas volvió a
demostrar de nuevo su calidad y cinco puntos seguidos suyos situaron de
nuevamente arriba a los de Kazlauskas. A 90 segundos para el final
Diaw con una inverosímil canasta puso de nuevo a Francia por delante; los
instantes finales fueron de tiros libres y siempre los franceses tuvieron una
ligera ventaja. No falló los cuatro que intentó Seibutis, pero tampoco lo
hicieron Heurtel y Diaw, la situación llegó a un extremo donde el pequeño
error que concedió Jasaitis costó la victoria porque Batum así lo
quiso con sus últimos tiros libres acertados. Con tres abajo y un segundo por
delante, Maciulis tuvo dos tiros libres. Antes de los lanzamientos habló con
Seibitusi y pactaron errar el segundo para pelear el rebote ofensivo. Éste, sin
embargo, cayó en manos de una Francia que al final se hizo con su medalla de
bronce gracias a su fe, su resistencia a la derrota y a la calidad de jugadores
como Lauvergne, Batum y finalmente Diaw.
En Twitter: @Danielbm200
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