El Real Madrid jugará la final de la Supercopa ACB tras apalizar ayer al Bilbao Basket por 100-61 en un partido en el que los blancos estuvieron especialmente acertados desde la línea de tres puntos (19 aciertos) y que finiquitaron en el segundo cuarto con un parcial favorable de 28-11 que destrozó a los vizcaínos. Jayce Carroll y Nikola Mirotic (ambos con 18 puntos) brillaron en las filas del cuadro merengue mientras que en el equipo vasco el destacado fue Alex Mumbrú (16 puntos).
El partido comenzó muy igualado, tanto madrileños como bilbaínos luchaban fuertemente en la pista; Kavaliauskas, Carroll, Pilepic y Mirotic destacaban hasta el momento en el choque que se rompió a favor de los blancos gracias a la entrada en pista del canario Sergio Rodríguez para asistir a Mirotic y que éste metiera un triple sobre la bocina que puso un marcador de 25-24 al final del primer cuarto. En el segundo cuarto el comienzo del Real Madrid fue muy bueno gracias a un alley-oop de Slaugther y una canasta de Rudy Fernández que siguió con varios puntos consecutivos de jugadores del equipo blanco; Germán Gabriel puso fin a la sequía anotadora de su equipo sacando un 2+1 poniendo fin a un 0-11 de parcial, pero el Real Madrid comenzó en este momento a arrollar y cada vez que llegaba a la canasta del Bilbao Basket anotaba, Raúl López dirigía al equipo vizcaíno pero la fuerte defensa blanca se empleó a fondo y se llegó al ecuador del partido con un resultado de 53-35.
Tras el descanso el partido no cambió de dinámica, el Real Madrid seguía abriendo brecha en el marcador ante un Bilbao Basket que se mostraba débil y que pudo mantenerse a flote un poco más gracias a los puntos de Mumbrú y Carmichael; en el conjunto merengue Niko Mirotic se mostró especialmente acertado en este tercer cuarto al lograr dos triples consecutivos que hacían que el partido tuviera un sólo color, Sergio Llull se unió al festival anotador blanco con casi 8 puntos seguidos para colocar un resultado de 73-51 al final del tercer cuarto. En el último período ya estaba todo prácticamente decidido, el cuadro vasco tiró la toalla y el Real Madrid aprovechó para dar minutos al tunecino Mejri y al canterano Dani Díez, que cumplieron bien y ayudaron a su equipo a aumentar la diferencia de puntos, a poner el marcador final y a establecer un record histórico de triples anotados por un equipo en la Supercopa ACB.
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